Los investigadores de CRETUS del departamento de Biología Funcional del grupo ECOTOX Jesús Aboal, Carme Pacín, Zulema Varela y José Ángel Fernández Escribano, junto con Rita García Seoane del Centro Oceanográfico de A Coruña y Aridane G. González da Universidade de Las Palmas de Gran Canaria detectaron en un estudio que las concentraciones de elementos potencialmente tóxicos registradas en algas pardas han ido disminuyendo en las últimas décadas a nivel mundial.
El estudio ahora publicado en la revista Journal of Hazardous Materials reveló que en el periodo comprendido entre 1933 y 2020, se detectaron que los niveles de cadmio, cobalto, cromo, cobre, hierro, mercurio, manganeso, plomo y zinc se redujeron entre un 60% y un 84% En concreto, en el periodo comprendido entre 1933 y 2020, se detectaron que los niveles de cadmio, cobalto, cromo, cobre, hierro, mercurio, manganeso, plomo y zinc se redujeron entre un 60% y un 84%.
El equipo de investigación relaciona las disminuciones con el aumento de la temperatura y la disminución del pH. Otra posibilidad, más esperanzadora sería quizás el éxito de la implantación de medidas ambientales encaminadas a reducir los vertidos al mar, en vigor especialmente a partir de las tres últimas décadas del siglo pasado.
Serán necesarias futuras investigaciones para conocer con mayor detalle la contribución individual de estas posibles causas a la disminución de los contenidos de metales pesados en las algas pardas detectadas.